La emergencia de discursos que promueven un trato inclusivo en prácticas que continúan configurando estructuras hegemónicas y tradicionales a nivel educativo, desarrollan unos imaginarios y representaciones sociales de lo que debería ser o no la infancia, reproduciendo una educación segregacionista y excluyente, y convirtiendo el jardín infantil en un dispositivo para la normalización y homogenización de los niños y las niñas en edades iniciales. A partir de esto, me pregunto qué representaciones construyo desde mi labor, durante la atención de niños y niñas en primera infancia. Para ello reviso los alcances del llamado modelo de inclusión, usando mi experiencia y releyendo los lineamientos y protocolos que se han establecido para concretar esta política. Así mismo, me vuelvo a encontrar con la comunagogía como postura y herramienta para la inclusión en el aula. Con el propósito de no separar lo emocional de lo conceptual, realizo un ejercicio autoetnográfico, situando mi ejercicio como maestra de jardín infantil de la Secretaría Distrital
de Integración Social en la ciudad de Bogotá, analizando el lineamiento pedagógico y curricular para la educación inicial en el distrito, las estrategias de enfoque diferencial, tensionando las prácticas inclusivas y revelando las representaciones que he construido de los niños y niñasde2 a 4 años, especialmente de quienes se atienden bajo el denominado modelo de inclusión.
Artículo: Sobre la Insurección del saber y el aprender
En la búsqueda de nuevas orientaciones epistemológicas para la construcción de conocimiento se propone un proceso dialógico entre diversos autores que, de manera argumentativa y reflexiva, permite comprender el conocimiento sin limitarse a una visión restringida de...